Editorial: GalaxiaGutemberg. Círculo de lectores.
Año: 2013
Género: Ensayo.
Páginas: 553.
ISBN: 978-84-15472-34-6
Páginas: 553.
ISBN: 978-84-15472-34-6
Hola amig@s. Hoy es un día extraño para mí.
Extraño porque traigo un libro diferente a las lecturas que suelo hacer, y
extraño porque realmente no sabía abordar la reseña que tenía pendiente de
hacer. En cualquier caso más que una reseña al uso, intentaré comentaros qué ha
supuesto la lectura de este ensayo histórico político: “LOS SEÑORES DEL PODER”.
SINOPSIS:
Este libro es un magistral
ensayo interpretativo de la historia contemporánea de España desde la invasión
francesa hasta la democracia post-franquista, pasando por la Restauración, la
Dictadura de Primo de Rivera, la Segunda República y la Guerra Civil. En su
recorrido a través de los grandes hitos de este largo devenir histórico, José
Varela Ortega nos deja reflexiones y análisis originales e instructivos sobre
la imagen, o el estereotipo, de España en la literatura occidental, los
diferentes sistemas políticos que se instauraron en España, los grandes debates
historiográficos en torno a ellos, el uso y abuso del tan debatido tema de la
“memoria histórica” en estos días, y el papel del ejército en la España
contemporánea, no sin desarrollar en el proceso una tipología del
pronunciamiento y un recorrido histórico comparativo del violento flirteo de
los militares con la política desde la Roma de Sila hasta el fallido golpe de
1981 en España. Un recorrido hilvanado por la aventura de algunos políticos
profesionales que ambicionaron el poder con pasión y se dedicaron a maximizarlo
con empeño. En ocasiones, lo hicieron en alianza con el “demos”, extendiendo e
impulsando derechos. Pero, a veces, sus querellas les llevaron hasta su propio
descalabro –arrastrando con ellos a los ciudadanos a quienes decían representar
o beneficiar. Por eso, esta es también la conmovedora historia de quienes
aprendieron de las catástrofes que generó su propia incontinencia. Decía Ortega
que de la historia, lo más interesante era aprender de los errores. Y, no
obstante, demasiados políticos, en lugar de interpretarla como fórmula de
comprensión, se aferran a Clio con voluntad anacrónica, cual maza de alabardero
que es un símbolo de poder.
AUTOR:
José Varela Ortega es presidente de la Fundación José Ortega y
Gasset-Gregorio Marañón y editor de “EL IMPARCIAL”. Doctor por la Universidad
de Oxford y doctor en Historia Contemporánea por la Universidad Complutense. Ha
sido catedrático de la Universidad de Santiago de Compostela, de la Universidad
de Valladolid y de la Universidad Rey Juan Carlos. Fellow de St. Antony´s
College (Oxford), del National Humanities Center y del Instituto Di Tella,
director del Colegio de España en París. Autor de publicaciones sobre historia
contemporánea y reflexión política, entre otras “Los amigos políticos”
(Alianza, 1977 y Marcial Pons, 2001), “Contra la violencia. A propósito del
nacional-socialismo alemán y del vasco” (Hiria, 2001), “El poder de la
influencia. Geografía del caciquismo en España 1875-1923” (Marcial Pons, 2001),
“Una paradoja histórica: Hitler, Stalin, Roosevelt y algunas consecuencias para
España de la Segunda Guerra Mundial” (Biblioteca Nueva, 2004), “Un puente sobre
el Sena o el regreso a Bruselas” (Cuadernos de Pensamiento Político, 2005).
¿Quién me iba a
decir a mí que un ensayo político me iba a aportar tanto? Ha sido una lectura muy satisfactoria, tanto que me
estoy planteando aficionarme al género. En primer lugar, la lectura de tantos
datos, opiniones, citas de personajes de la historia de España, políticos,
literatos, filósofos, etc. aporta gran cantidad de conocimientos. Y denota una
formación y una sabiduría por parte del autor que me produce envidia cultural,
y no sabría decir si es un tipo de envidia buena o mala.
Os contaré qué
me he encontrado a lo largo de la lectura. Me he encontrado con un inicio donde
se nos explicitan las intenciones de la obra y un análisis de los estereotipos
del pueblo español, y para muestra un botón: “Gentes republicanas en el fondo, según Stendhal, de una rectitud y orgullo instintivos que les
defiende frente al servilismo” (pág. 61). Creo que es una descripción
certera para situarnos en el contexto de la Guerra de la Independencia y el
violento y convulso siglo XIX de nuestra tierra.
Encontraremos
además un recorrido por el papel que jugaron los cuarteles y los militares en
los pronunciamientos políticos, en los gobiernos y en la gestión del poder en
el citado siglo, promovidos en su mayoría por políticos cegados por el poder: “En este país –se lamentaba O´Donnell- donde todos han conspirado cuando no han
ocupado el poder; desgraciadamente no hay un solo hombre político que con la
mano puesta en el corazón pueda decir, yo no he conspirado” (pág. 77). Que
actual, ¿verdad?
Precisamente
para evitar la violencia y las rebeliones nació el periodo de la alternancia
política y la Restauración, que intentaba acabar con la tradicional política de
exclusión del contrario político y que solía acabar en marginación y
desencanto, sinónimos de rebelión. Podréis degustar infinidad de reflexiones y
citas de figuras políticas como Cánovas y Sagasta, antes de que el ejército
hastiado, sobredimensionado y olvidado retome de nuevo el poder tras el golpe
de Primo de Rivera en 1923.
Y finalmente
llegaréis a la parte que más me ha gustado a mí, la República, de la que me
quedo con datos como la escasa formación y el perfil político deficiente de la
mayoría de los gobernantes, sumado a un carácter déspota y radical. Un hecho
curioso, pues todos conocemos excepciones como Ortega, Prieto, Azaña,
Marañón…Conoceremos algunos errores de gobierno como la marginación del
ejército y una política agraria de expropiaciones contraproducente que crearon
una República poco pública. También conoceremos el lamentable golpe militar
africano, y cómo sin demasiadas expectativas de éxito, acabó en una catastrófica
Guerra Civil. Finalmente, el golpe no restauró el Estado como vendía, sino que
se apropió de él.
También es
interesante el análisis de la Transición, el reconocimiento de los errores y
las concesiones que se hicieron unos y otros, y que ahora se están convirtiendo
en claudicaciones.
Y para finalizar
os dejo otras dos perlas del libro con las que intento despertar vuestra
curiosidad. Acerca de la especulación bancaria en comparación con los
políticos: “¡Como si ellos no hubieran
hecho otra cosa desde Pisístrato que especular!... Sobre el poder. Y especular,
especular, claro que se ha especulado en demasía. Suele ocurrir, cuando, de un
sistema pensado con el freno de la quiebra, se percibe que, en lugar de
arruinado, sale uno indemnizado y, en vez de juzgado, con las pérdidas
socializadas…” (pág. 31-32). Y acerca del conflicto catalán: “Antoni de Capmany, supo formular el
principio de ciudadanía con preferencia al de territorialidad: “aquí no hay
provincia, aquí no hay más que Nación; hay diputados por […] más no de. Bien
podemos decir que los hombres tienen más cariño a su tierra a medida que son
más incultos e ignorantes” –remachaba el diputado catalán.”
Si habéis llegado hasta aquí podréis
comprobar que al final ha quedado un comentario demasiado largo, y seguro que
para los que no gusten de estos temas pesado. Aun así, os animo a leer este
magnífico ensayo. Eso sí, tendréis que ponerle temple y atención. Para mí 4 PLUMAS-BUENÍSIMO.
FUENTES:
Me parece muy interesante y si te ha aportado algo, pues mejor. Pero, de momento, no me animo con él.
ResponderEliminarUn beso.
Aunque me gustan los ensayos el de tema político me tiene un poco agotada, supongo que principalmente andamos naufragando en la política desde hace demasiados años.
ResponderEliminarUn saludo.
No conocía este libro y de vez en cuando me gusta sumergirme en ensayos, cierto que son dificiles de reseñar, pero tu has solucionado muy bien tu papeleta.
ResponderEliminarSaluditos
Estoy un poco cansado de los asuntos políticos, aunque este libro lo tendré en cuenta a ver si consigo entender lo que nos esta pasando.
ResponderEliminarUn saludo.
No conocía el libro y a pesar de tus opinión positiva sé que no es un libro para mí, no creo que lo disfrutase así que lo dejaré pasar
ResponderEliminarBesos
Pues has hecho una reseña muy buena. Pero no creo que me anime con este libro. Me tiene cansada ya la política...
ResponderEliminarBesotes!!!
Yo llevo un par de años que no le hago ascos a los ensayos, me apetece intercalarlos de vez en cuando con los libros de ficción, así que no digo que no al libro; además Galaxia Gutenberg es de lo mejorcito que tenemos en este país en cuanto a publicaciones de este género. Un abrazo.
ResponderEliminarBuff me alegro de que te haya gustado y realmente suena interesante pero no estoy en mi mejor momento.
ResponderEliminarUn beso!
Me gustan los ensayos, me gusta entender la lectura no solo como entretenimiento sino también como forma de aprendizaje y conocimiento, pero el tema político he de reconocer, Pakiko, que me desborda y se jaya muy alejado de mis intereses.
ResponderEliminarUn abrazo,
No soy mucho de ensayos aunque este parece interesante por lo que nos cuentas de él en tu reseña. Un abrazo, Paco.
ResponderEliminarNo soy una gran aficionada a los ensayos, aunque este parece interesante, así que no lo descarto del todo.
ResponderEliminarBesos:)
Pues lo siento, pero he leído un par de frases acerca de las cual discrepo totalmente, o sea que lo dejo pasar del todo.
ResponderEliminarBesos!
Pues la verdad es que tiene muy buena pinta.
ResponderEliminarNo es lectura para mi la verdad, de todos modos gracias por traerlo. Besos.
ResponderEliminarTe he nominado a un premio en mi blog:)
ResponderEliminarBesos
Pues sí, cansados de política estamos, pero si es un buen ensayo, seguro que aporta algo y nos hace ver las cosas de otra manera. Apuntado pues. Gracias!
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